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05 - Rehabilitación y seguimiento
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Rehabilitación y seguimiento
Fisioterapia y ejercicios en casa: Componentes esenciales de un tratamiento eficaz de la artrosis de rodilla con Guided DolorClast® Therapy
La fisioterapia y los ejercicios en casa son cruciales para tratar la artrosis de rodilla y conseguir una movilidad óptima. Los tratamientos con soluciones DolorClast® proporcionan alivio y permiten una rápida reincorporación a las actividades cotidianas, pero la incorporación de la fisioterapia junto a estos tratamientos puede aumentar los beneficios generales tanto a corto como a largo plazo. La fisioterapia, como parte de la Guided DolorClast® Therapy, proporciona un enfoque integral del tratamiento de la artrosis de rodilla.
Ejercicios para la artrosis de rodilla en casa: estiramientos, fortalecimiento, aeróbic, equilibrio e isométricos para aliviar el dolor y mejorar la movilidad
- Ejercicios de estiramiento y flexibilidad: Estos ejercicios tienen como objetivo mejorar la amplitud de movimiento y reducir el dolor y la rigidez de la rodilla. Algunos ejemplos son los estiramientos de isquiotibiales y cuádriceps. Asegúrese de mantener cada estiramiento durante 15-30 segundos y repetirlo varias veces.
- Ejercicios de fortalecimiento: Los ejercicios de fortalecimiento ayudan a mejorar la estabilidad y el apoyo alrededor de la articulación de la rodilla. Ejercicios como las elevaciones de pantorrilla, las sentadillas de pared y las extensiones de pierna son una buena forma de fortalecer los músculos que rodean la rodilla. Empiece con un peso ligero y auméntelo a medida que progrese.
- Ejercicios aeróbicos de bajo impacto: El ejercicio aeróbico ayuda a mantener un peso saludable, lo que puede reducir la tensión en la articulación de su rodilla. La natación, el ciclismo y los ejercicios aeróbicos acuáticos son excelentes opciones, ya que suponen un esfuerzo mínimo para su rodilla. Intente realizar 30 minutos de actividad aeróbica de 3 a 4 veces por semana.
- Ejercicios de equilibrio y estabilidad: Estos ejercicios ayudan a mejorar el equilibrio, la coordinación y la estabilidad, reduciendo el riesgo de caídas y lesiones. Algunos ejemplos son las paradas con una sola pierna o los ejercicios con la tabla de equilibrio. Empiece con ejercicios sencillos y aumente gradualmente la dificultad a medida que vaya mejorando.
- Ejercicios isométricos: Estos ejercicios consisten en contraer los músculos sin mover las articulaciones. Las extensiones y contracciones de rodilla son una forma estupenda de desarrollar fuerza y estabilidad en la articulación de la rodilla. Empiece con una resistencia ligera y mantenga cada contracción entre 5 y 10 segundos, repitiendo varias veces.
Recuerde consultar a su fisioterapeuta o médico para determinar el mejor plan de ejercicios para sus necesidades individuales y asegurarse de que está haciendo los ejercicios correctamente para evitar más lesiones.